Los consumidores, cada día con más facilidad se abstraen de los mensajes publicitarios o directamente los rechazan. Debido a esta evolución del conocimiento del consumidor/usuarios es cada vez más difícil construir marcas. La publicidad que se detecta como tal a menudo se rechaza y es muy difícil conseguir impactar de manera diferente. Las marcas buscan otro tipo de presencia
La generación de contenidos abre un nuevo mundo de posibilidades para las marcas. Y definimos como contenido aquello por lo que el consumidor está dispuesto a pagar con su tiempo o dinero. Se termina con un modelo que, a pesar de todos sus defectos, era honesto y avisaba: “ahora viene la publicidad y te voy a vender algo”.
¿Por qué la publicidad debe entrar en contenidos? Porque la saturación mediática actual obliga a cualificar el impacto, porque es posible transmitir valores y mensajes a través de múltiples formatos y porque el consumidor lo considera información de interés y está predispuesto a asimilarlo. La publicidad dejará de ser un gasto para ser una inversión (los consumidores estarían dispuestos a pagar por contenidos que les resulten apetecibles) y que la ventaja competitiva será para aquellas marcas que consigan llegar a formar parte del ocio de los consumidores.
También puede considerarse que contenido es aquello que el consumidor va a buscar. Los mensajes se digieren mejor en los contenidos y es un formato óptimo para transmitir valores, pero tampoco el formato debe hacer olvidar la razón de ser del anunciante: vender un producto o servicio.
Éstas han sido nuestras propuestas para la generación de contenidos:
No hay comentarios:
Publicar un comentario